miércoles, 2 de noviembre de 2011

[Carrusel Bloguero] El Terror y lo Sobrenatural en los juegos de rol

Este mes ha tocado un tema bastante interesante y radicalmente opuesto al anterior; además, es una cuestión que siempre me ha resultado muy atractiva, dado lo aficionado que soy al género. Imagino que los artículos girarán la mayoría en torno a proporcionarnos soluciones y consejos a la hora de infundir terror en nuestros queridos jugadores, o al análisis de la relación rol-terror y si esta es posible. En mi caso, voy a intentar esta ocasión ser algo más pragmático y concreto, y en vez de generalizar tanto, daré algunas pautas para adaptar el terror oriental a nuestra partidas de rol.

Pero… ¿qué es el terror asiático u oriental? Realmente, es una acepción que engloba determinadas películas de terror que comparten no solo un marco geográfico, sino también unas determinadas pautas que las convierten en comunes, una serie de rasgos inherentes que son perfectamente identificables. Son esta serie de películas las que encuentran un empujón muy fuerte a inicios del siglo XXI, y que tuvieron un período de esplendor que llevó a muchas de ellas a inundar las pantallas de cines alrededor de todo el mundo y a los amigos norteamericanos a, como siempre que ven dinero, copiarlas y en mi juicio estropearlas.

 Con esa mirada, imposible decir No.

¿Qué rasgos comparten estas películas? En primer lugar, un argumento envolvente y cercano, pero marcadamente sobrenatural. En la mayor parte de estas películas, tendremos como protagonista la venganza, elemento cohesionador que proporciona fuerza al ente malvado que atormenta a los vivos. Es un fantasma, exclusivamente femenino, y basado en la mitología oriental, marcadamente japonesa, del siglo XII y posterior.  Hemos comentado que la venganza les mueve, pero además de esto, poseen una estructura similar: aparte del sexo, tienden a poseer cierto estereotipo, de forma que estas criaturas se nos muestran delgadas, con un pelo liso y largo, y embadurnadas en abundante maquillaje blanco, resaltando sobremanera sus ojos. Es, por supuesto, un ideal del fantasma oriental que difiere bastante del nuestro. 

 Para este tipo de cosas hace falta Comprensión Idiomática

Ya he dicho que la venganza es su elemento clave: la explicación que se tiende a dar del tormento que sufren los protagonistas es un cúmulo de sentimientos negativos que motivan que el malvado ser no pueda aspirar a otra vida, y permanezca en nuestro mundo destruyendo todo lo que pueda, ya sea a través de una persona en concreta o ligada a cualquier tipo de objeto. Por si fuese poco, destacan estas películas por la invencibilidad que ostenta dicha criatura: nadie sabe dónde aparecerá o cómo, pero es prácticamente imposible de vencerle. No hay gestas heroicas ni frases hollywoodienses: una vez te pilla, estás acabado. El protagonista de la historia es marcadamente humano, y se intenta capturar siempre la esencia de las personas enfrentándose a algo completamente antinatural y terrorífico. No hacen falta gritos estruendosos: una mirada basta para reflejar el terror más primario.


Bueno, ya he descrito brevemente las peculiaridades del argumento, pero estas películas gozan de unas excelentes puestas en escena: no hay grandes sustos. El ambiente es marcadamente sobrecogedor, con planos que buscan los rostros cercanos, con la práctica ausencia de música y las descripciones visuales de espacios vacíos, grises, vacuos. Está ahí, y lo sabes, pero no se puede detener. El espectador contempla como el personaje sigue una serie de pesquisas para averiguar determinada prueba que le acerca al misterio que envuelve ese fatídico ser, pero ello le conduce irremediablemente a su final. ¿No es suena esto a Lovecraft? Simplemente, no hacen falta primigenios ni cuestiones que trascienden la mente humana: baste un solo espíritu para destruir todas nuestras esperanzas. Junto a ello, estas criaturas no suelen seguir un patrón fijo: no atacan a determinada familia, ni a una sola persona que es heredera de otra que ya tuvo problemas con dicha entidad, no: es el puro azar, en la mayoría de las ocasiones, el que conduce a tu encuentro con dicho fantasma. Y ello es profundamente desolador, pues se busca que el espectador se haga la pregunta: ¿y por qué no yo? Ejemplos, La Maldición o The Ring, donde una cinta y una casa son objetos inanimados sin voluntad propia.

Ya hemos definido este tipo de cine, pero esto… ¿Cómo lo trasladamos a nuestras partidas? Creo que he dado bastantes pistas con lo descrito anteriormente para que a más de uno le surjan ganchos por doquier, pero matizaré algunas cosas que son, en mi opinión, importantes. Cuando quieras montar una partida basada en este tipo de películas o ambientaciones, piensa que deben ser cortas: de nada sirve una extensa campaña, pues los jugadores se acaban cansando y el factor tensión se pierde con el tiempo. Veo más disfrutable una partida corta pero intenta, con una trama concreta y simple, basada en lo comentado antes: no debemos buscar que los jugadores se coman la cabeza con pistas falsas o imposibles de discernir. Nos interesa que el camino que se siga sea llano, pero que tenga un final cumbre. Seguramente, la mayor parte de tus jugadores sepan con qué se van a encontrar al final o lo intuyan, pero eso no será un obstáculo si sabes darle grandes dosis de descripción y tensión a algunas escenas, escenas que deben ser en una buena parte individuales, sobretodo aquellas relacionadas con los personajes, que deberán enfrentarse a estos seres en la mayoría de las ocasiones solos. Por ello, considero que un grupo reducido tiende a mejorar aún más la experiencia de juego. Decía que la descripción era importante, pero la hablada: no pienses en música de ambiente o velas. No hacen falta, aunque jugar de noche siempre ayuda. Debes tener a tus jugadores bien informados, debes mostrarles cada rincón de lo que sus personajes están contemplando, y estos deben ser grises, apagados, descorazonadores. En la mayoría de los casos, equípate de una serie de PNJs que puedan servir como carne de cañón para que la angustia de los personajes aumente. Condúceles a sus propios miedos, y establece una serie de pautas a la hora de describir una serie de rasgos comunes para tu espíritu malvado. Un grito concreto, un sonido diferente, un par de golpes en la mesa. Eso les alerta y genera tensión. Junto a ello, soltar de vez en cuando un sustillo (un grito en medio de una descripción) hará que más de uno salte, cosa que ya he probado en más de una ocasión y, al menos en mi caso, no tuvieron problemas de venganza hacia mi persona, sino todo lo contrario. 

 Fallando tirada a PER. Mala suerte, chica.


Bien, con esto creo que debería ser suficiente, pero mi último consejo va a lo que debe ir: infórmate sobre este tipo de películas. Contempla en ellas los magníficos recursos de los que puedes disponer. Yo, como buen amante del género, voy a recomendaros algunas que considero muy interesantes y, sobretodo, que no se alejan demasiado de lo que hemos hablado. Además, tenemos por fortuna el juego Bakemono, de Nosolorol, que tiene hasta cierto punto similitudes con lo que hemos estado comentando, aunque no lo he probado y no puedo afirmaros que tal está. En mi caso, uso Haunted House como motor para desarrollar estas partidas. Os dejo con una pequeña lista de recomendaciones accesibles y generalizadas:

-The Grugde (La Maldición): en su versión japonesa, heredera de Ju-On, fue la que internacionalizó más aún este género tras The Ring. La diferencia: la segunda era ya la versión americana, y aquí no nos interesan los remakes. Ju-On suponía las bases de este tipo de pelis, y The Grugde las llevaba un paso más allá. Exquisita para lo que nos interesa.
-Ringu: la original de la que vendría The Ring. Película muy interesante, sobretodo por el apartado visual y la propia historia, que se puede extrapolar a una buena partida de rol.
-Chakusin Arii: en el idioma de Cervantes, Llamada Perdida. Encuentro en esta película una forma excelente de adaptar las nuevas tecnologías a este tipo de terror, aunque sigo prefiriendo las dos anteriores.
-Kairo: En la versión norteamericana, Pulse. Fantástica película que, sin embargo, se aleja algo de los estándares tradicionales marcados antes, pero que podría suponer otra forma de ver un argumento ideal para una partida.

No me he detenido a desarrollar mucho los argumentos, pero os invito a que las veáis y juzguéis por vosotros mismos. Puede que este tipo de películas tampoco os den miedo, pero que ello no sea impedimento para crear una buena historia que sí pueda, sino asustar a vuestros jugadores, haceros pasar una buena tarde de invierno. Ah, y cuidado si notáis un murmullo cerca vuestra: nunca se sabe quién puede estar a nuestro lado….

 Mató a su paladín, y ahora clama venganza


1 comentario:

  1. GRANDE, a mi Ringu me gustó infinitamente más que The Ring, por muchas cosas. Sobre todo me ponía los pelos de punta la escena del marido, ya muerto, con el pañuelo en el cabeza (como fantasma) señalando la solución...

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