Animales. Muchos tienen un animal en sus vidas, ya sea un perrito coñazo, un gatito gordo, un canario, un hámster y una iguana exótica. Da igual, son animales que nos acompañan y a los que cogemos cariño. Algunas veces, incluso les enseñamos cosas, trucos y demás parafernalia para intentar llegar al máximo nivel de identidad posible humano-animal. Y en rol pasa muchas veces esto, pues al fin y al cabo, es un reflejo de la vida real. Hoy voy a hacer una pequeña reflexión sobre la importancia nula de los animales en el quehacer rolero.
El gato es el mejor animal rolero. Aquí, un gato con 20 en CAR. Todo tipo de pruebas sociales ganan un +2 con este animalito en tus brazos.
Los animales en el rol no suelen servir para nada. No son más que meras sombras que no hace nada servible, a no ser que sean para ser comidas. A los jugadores se la suele traer floja lo que pase con ellos. En cuanto a lo primero, siendo yo Máster, siempre me gusta que cuando mis jugadores compran un caballo le pongan nombre. Eso ya implica 20 minutos gastados en dicho proceso. Luego, a las dos sesiones, el caballo ha muerto saltando por un acantilado o desapareciendo en la más absoluta Nada. Algunas veces han sentido que algún animal se haya ido, pero generalmente la trae floja. ¿Pasaría eso en la vida real después de tanto tiempo con él? No, pero los jugadores son héroes curtidos en mil batallas y la visión de un caballo cayendo a cámara lenta solo trae consigo un grito de cinco milisegundos: ¡Blanco! Fin. A los cinco minutos no se sabe más del caballo.
Blanco - Caballo blanco. Pura originalidad la de los jugadores de rol.
No es esto una crítica a los jugadores por hacer eso. Al fin y al cabo, a mí no me gusta tener que interpretar a un perro, lo siento mucho. Lo máximo a lo que aspiro con seres sin inteligencia son trasgos y zombis. Lo de que me digan: el perro hace esto y lo otro; y yo sí, sí, me aburre y me cansa. Que pesados con el puto perro, a la próxima oportunidad me lo cargo. Y de hecho, más de una vez me cargo un animal por cansino, pero lo normal es que el jugador sea tan gamba que deje en un risco abandonado al perro y atado encima mientras ellos saquean mazmorras. Luego salen y el perro no está. Claro, más cuando has visto águilas gigantes sobrevolando la zona. Pero eh, era un perro.
Luego están los que se creen que los animales son como el ratón del Dragon Quest VIII, que solo faltaba hacer ecuaciones. Te piden cosas para los animales que no pueden sacarte más que una sonrisa escéptica, una suerte de gesto enternecedor; el chaval tiene imaginación, desde luego. Yo lo llamo metarrol. Y si no, que se lo digan al tío que quería que su perro, de la nada, fuese a por un rico mercante, diese tres vueltas alrededor de él, le cogiese de la manga, lo llevase a un punto de encuentro y allí le ayudase a sortear una serie de guardas que custodiaban el lugar. Y luego volver. Todo eso en 2 horas, ni un segundo más o te ato al risco de las águilas gigantes.
Al perro se le tiene como el PNJ animal más inteligente...
...pero no hay nada que hacer con un gato. Estos animales son demasiado.
En fin, para mí lo del tema animalesco en el rol a veces se va un poco de las manos. Creo que están hasta cierto punto extremizados: o son mierda, o son demasiado importantes e inteligentes. Más cuando encima te tienes que tragar al jugador enseñándote Señores de lo Salvaje y la Quintaesencia del Explorador, hablándote de Dotes y la importancia capital de Trato con Animales con 6 rangos. Cada Mástercillo tiene su librillo, y en el mío está lo siguiente: si los animales consiguen crear vínculos de afecto con los jugadores y su destrucción atroz te permite añadir algún capítulo de dramatismo de la aventura, úsalo. De no ser así, déjalos por ahí dando vueltas. Al fin y al cabo ¿tiene el héroe tiempo, entre dungeons y guerras, de darle de comer tres veces al día? Sí, pero para eso están los gnomos ¿no?
Espero vuestras opiniones.
Los animales se anotan en "equipo", y duele más perder un caballo que una cantimplora porque cuesta más.
ResponderEliminarPor otra parte, tener un animal "familiar" es un riesgo que pocos están dispuestos a asumir, ya que la diñan con mucha facilidad y te quedas bien jodido.
Pues sera cada uno. Yo siemrpe que consigo un animal/mascota lo cuido y lo trato como haria en la vida real, mas o menos. Y a no ser que este adiestrado no le doy ordenes (salvo algun quizas "largate" en una batalla xD o un "ven aqui", a ver si cuela y lo entiende)
ResponderEliminarEn definitiva, estoy con Dan. Pero depende tambien del jugador
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ResponderEliminarYo recuerdo que uno de mis personajes tenía un cuervo al que trataba muy bien (que los compañeros llamaron "Genitales" en un momento de desvarío, lo que daba lugar a muchas frases tontas con dobles sentidos). Otro de mis personajes tuvo una pequeña serpiente quimérica que se llamaba "Nibbler" y que siempre iba con él enroscada en su cuello o dentro de las mangas.
ResponderEliminarCreo que un compañero animal llamativo da mucha personalidad a los personajes además de ofrecer unas situaciones interpretativas muy tiernas y algunas veces cómicas. Además se pueden tratar temas tan profundos como la amistad o la relación del hombre con la naturaleza si se le da el enfoque apropiado. Eso sí, estoy completamente de acuerdo con que las declaraciones absurdas de los jugadores que afirman que "su animal está amaestrado" y puede resolver la aventura él solo resultan muy enervantes. También hay que saber ser un buen jugador.
(A todo esto, eliminé el último comentario porque tengo la mala costumbre de no revisar las erratas antes de darle al botoncito de publicar. Me puede el ansia viva.)
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